La creatividad no es un talento exclusivo de unos pocos, es una capacidad que todos poseemos y que puede cultivarse desde edades muy tempranas. Esto a través de casa, el aula y distintas actividades extracurriculares como las artes.
Debido a que la creatividad en la primera infancia juega un papel fundamental en el desarrollo de los niños. Aquí abordaremos qué es, cómo se relaciona y qué actividades creativas para niños pueden impulsarla.

¿Qué entendemos por creatividad en la infancia?
La creatividad y habilidades artísticas en preescolar se manifiestan en la capacidad de imaginar, inventar, explorar y transformar. No se trata solo de hacer dibujos o crear historias fantásticas. Sino de una forma de pensar y actuar que les permite encontrar soluciones innovadoras, adaptarse a nuevas situaciones y ver el mundo desde perspectivas diferentes.
A través del juego simbólico, las preguntas y las actividades artísticas, los niños desarrollan su pensamiento divergente. Es decir, la habilidad de generar múltiples respuestas a un mismo estímulo. Aprenden a pensar fuera de la caja.
¿Por qué es importante la expresión artística en la primera infancia?
La expresión artística es una de las formas más naturales de comunicación para los niños pequeños. Antes de hablar con fluidez, muchos niños ya se expresan a través del movimiento, los gestos, el dibujo y la música.
A través del arte, los niños exploran emociones que aún no pueden verbalizar. También desarrollan la coordinación motriz fina y gruesa. Así como aprenden a observar y representar su entorno y fortalecen su autoestima, al sentirse capaces de crear algo propio.
Además, el arte en educación inicial les permite representar y procesar experiencias vividas, ya sean cotidianas o significativas, lo cual es fundamental para su bienestar emocional.
Manifestaciones artísticas en la primera infancia
Durante los primeros años de vida, la expresión artística se presenta de múltiples formas. Algunas de las más comunes son:
1. Dibujo y pintura
A través del dibujo, los niños representan lo que ven, sienten o imaginan. Desde los primeros garabatos hasta las primeras formas reconocibles, este proceso fortalece la coordinación ojo-mano, el control del trazo y la capacidad de simbolizar.
2. Modelado y escultura
Jugar con plastilina ayuda a desarrollar la motricidad fina y el sentido táctil. Además, permite trabajar en tres dimensiones y comprender conceptos como volumen, forma y proporción. Los niños pueden construir figuras, personajes o simplemente explorar texturas y colores.
3. Música y canto
El ritmo, la melodía y el sonido tienen un efecto poderoso en los niños. La música estimula el lenguaje, la memoria, la concentración y la expresión emocional. Cantar canciones, tocar instrumentos o improvisar sonidos con juguetes son actividades de expresión artística infantil que además fortalecen el sentido auditivo y fomentan la socialización.
4. Danza y movimiento
El cuerpo también es un medio de expresión y creatividad en la primera infancia. Bailar, moverse libremente al ritmo de la música o realizar coreografías sencillas permite a los niños conocer su cuerpo, mejorar su equilibrio y expresar emociones. Es una forma de comunicación no verbal que fortalece la identidad y la coordinación motora.
5. Juego dramático y teatro
El juego simbólico como imitar, representar personajes o recrear situaciones, es una de las formas más complejas y completas de expresión artística. A través del juego dramático, los niños desarrollan la empatía, el lenguaje, la memoria y la resolución de conflictos, al tiempo que exploran roles, emociones y puntos de vista distintos.
El rol del docente en la estimulación artística
Los adultos tienen un papel clave en el desarrollo creativo de los niños. No se trata de enseñar técnicas de expresión artística infantil como si se tratara de un curso formal, sino de crear entornos que favorezcan la exploración libre y el disfrute del proceso creativo.
Para incentivar la creatividad en la primera infancia se recomienda realizar prácticas relacionadas con metodologías centradas en el bienestar de los niños. Algunas de las más utilizadas son:
- Valorar el proceso por encima del resultado: No importa si el dibujo “no parece un perro” o si la canción tiene errores, lo relevante es la intención, la expresión y la experiencia.
- Ofrecer materiales variados: Crayones, pinturas, pinceles, cartón, telas, música, instrumentos, etc. Cuanto más variados los estímulos, mayor exploración.
- No imponer reglas rígidas: Dar libertad para elegir colores, formas, personajes, movimientos. La creatividad en la primera infancia florece cuando no se limita.
- Fomentar la confianza: Evitar críticas o comparaciones. Cada niño tiene su propio ritmo y estilo, y todas las formas de expresión son válidas.

Creatividad en la primera infancia como base del aprendizaje
Contrario a lo que a veces se cree, el arte en educación inicial no es una actividad “decorativa” o secundaria en la educación. De hecho, tienen un impacto directo en el desarrollo del pensamiento lógico, lingüístico, matemático y científico.
Por ejemplo, al experimentar con colores y mezclas, los niños hacen pequeñas hipótesis, observan resultados y sacan conclusiones. También aprenden a nombrar cada color, relacionar conceptos e identificar patrones.
En este sentido, la creatividad no compite con el aprendizaje académico, sino que lo enriquece, lo hace significativo y lo conecta con la experiencia emocional del niño. Esto, a través de diferentes actividades creativas para niños.
Expresión artística e inclusión
Otra gran ventaja del arte es que es un lenguaje universal e inclusivo. Niños con diferentes habilidades, culturas, lenguas o condiciones de desarrollo pueden expresarse a través del arte en educación inicial. El arte no exige palabras, no tiene respuestas correctas y acoge la diversidad como fuente de riqueza.
En contextos educativos como los promovidos por la inclusión en la NEM, LA expresión artística infantil puede formar puentes para integrar a todos los niños, fomentar el respeto por la diferencia y generar un ambiente de aceptación y empatía.
De igual forma, fomentar la creatividad en la primera infancia no es un lujo ni una actividad optativa. Es una necesidad fundamental que impulsa el desarrollo integral del niño, fortalece sus capacidades cognitivas y emocionales. También lo prepara para enfrentar un mundo cambiante con imaginación, sensibilidad y pensamiento crítico.
La relación de los padres con creatividad en la primera infancia
Los papás y mamás deben asumir el compromiso de crear entornos ricos en estímulos, donde los niños puedan expresarse libremente sin temor al juicio, y donde el arte se viva como un derecho y una herramienta poderosa de crecimiento humano.
Y es que, cuando un niño crea, no solo está jugando, está construyendo su mundo interior y también el futuro del mundo que todos compartimos. Allí la importancia de exigir el arte en educación inicial como parte del programa educativo reconociendo el valor de actividades creativas para niños tanto escolares como extracurriculares.