Como una auténtica revolución, la Nueva Escuela Mexicana representa una reforma profunda del sistema educativo en México. Esto, especialmente en los primeros niveles de la educación tanto pública como privada.
Su enfoque rompe con muchos elementos del modelo tradicional de preescolar, proponiendo una educación más inclusiva, participativa y centrada en el bienestar. Es por eso que nos preguntamos qué cambios de la NEM en preescolar propone ¡Aquí lo averiguamos!
Enfoque en el desarrollo integral y no solo en lo académico
Una de las diferencias del nuevo modelo educativo más importante es el cambio de una educación centrada en contenidos académicos hacia una visión integral del desarrollo infantil. En el modelo tradicional, muchas veces se privilegiaban actividades como el aprendizaje de letras, números o la memorización.
La NEM, en cambio, busca que el desarrollo físico, emocional, social y ético del niño sea igual de importante. Así, las maestras y maestros deben trabajar con actividades que fortalezcan la autoestima, las relaciones interpersonales, la creatividad, el desarrollo socioemocional y la conciencia del cuerpo.
Participación activa del niño
En el modelo tradicional, el maestro era la figura central del aula. Dirigía las actividades, impartía conocimientos y los alumnos seguían instrucciones. Este enfoque ha sido sustituido por una propuesta donde el niño es protagonista del aprendizaje.
Con los cambios la cambios de la NEM en preescolar fomenta el aprendizaje activo, donde los niños descubren, exploran, preguntan y participan en la construcción del conocimiento. El rol del docente se transforma en el de un guía que observa, propone, facilita e interviene (de ser necesario) según los requerimientos de cada niño.
Incorporación del juego como estrategia de aprendizaje
Aunque el juego siempre ha estado presente en el preescolar, muchas veces se veía como una actividad poco relevante o como premio. Con los cambios de la NEM en preescolar se pone al juego en el centro del proceso educativo.
El juego es considerado una herramienta pedagógica fundamental porque permite a los niños aprender de forma natural significativa. Ya no se trata solo de juegos libres, sino de diseñar juegos intencionales que promuevan el desarrollo de habilidades cognitivas, sociales, motrices de conocimientos y lingüísticas.
Énfasis en la educación socioemocional
Otra novedad importante es que la NEM incorpora de manera estructurada la educación socioemocional como parte esencial del currículo. Antes, las emociones se abordaban de forma reactiva, dependiendo del criterio del docente.
Ahora, se reconoce que el aprendizaje emocional es tan importante como cualquier otra área del conocimiento. Se enseña a los niños a reconocer, nombrar, expresar y regular sus emociones. También se promueven habilidades como la empatía, la resolución de conflictos, la colaboración y la responsabilidad afectiva.
Vinculación con la comunidad y el entorno
Una de las diferencias del nuevo modelo educativo es que antes, la escuela funcionaba de forma aislada, con poca relación con las familias o el entorno social. En cambio, la Nueva Escuela Mexicana impulsa una fuerte vinculación entre la escuela, familia y comunidad.
Se busca que el aprendizaje esté conectado con el contexto real del niño, con su cultura, su historia, sus tradiciones y su entorno social. Esto se refleja en actividades como excursiones, proyectos comunitarios, celebraciones culturales, así como con la participación activa de madres, padres o tutores.
Inclusión y equidad como principios rectores
Los cambios de la NEM en preescolar establecen que la escuela debe ser un espacio incluyente, donde todos los niños y niñas tengan las mismas oportunidades. Esto sin importar su género, condición social, origen étnico, religión o discapacidad.
Esto implica, por ejemplo, adaptar materiales, ritmos y estrategias para atender la diversidad, eliminar prácticas discriminatorias o promover la equidad de género desde edades tempranas.
Adopción de metodologías activas
El modelo tradicional utilizaba principalmente estrategias de aprendizaje pasivas como la repetición, el dictado o las hojas de trabajo. Con los cambios de la NEM en preescolar se apuesta por metodologías activas que estimulan la autonomía, el pensamiento crítico y la colaboración.
También promueve el uso de proyectos, juegos didácticos, actividades por rincones, trabajo en equipo, experimentación y uso de materiales concretos. Además de impulsar el arte, música, expresión corporal y la adopción de tecnología adaptada al entorno educativo.
Evaluación cualitativa y formativa
Antes, la evaluación en preescolar podía estar basada en boletas y calificaciones. En ocasiones, incluso se emitían observaciones que no reflejaban realmente el proceso de aprendizaje y sus resultados.
Entre las diferencias del nuevo modelo educativo encontramos que ahora se propone una evaluación formativa, continua, cualitativa y centrada en el proceso. Se valoran los avances individuales, el contexto de cada niño y se identifican oportunidades de mejora. El objetivo no es etiquetar, sino comprender cómo aprende cada niño para guiarlo en su mejora.
Educación para la vida y la ciudadanía
Uno de los grandes cambios de la NEM en preescolar es que no solo busca formar estudiantes, sino ciudadanos comprometidos, conscientes y participativos. Por eso, desde preescolar se trabaja la educación en valores, los derechos humanos, el respeto a la naturaleza y la participación democrática.
Se enseña a los niños a expresar opiniones, tomar decisiones, escuchar al otro, cuidar el ambiente, resolver conflictos y participar activamente en la vida escolar. Esto fortalece su sentido de pertenencia, su autoestima y su responsabilidad social.
Uso de materiales más diversos y significativos
El aula tradicional solía estar llena de láminas, libros de texto y materiales impresos. La NEM promueve el uso de materiales variados, multisensoriales, manipulativos y relacionados con el entorno.
Esto incluye objetos de la vida cotidiana, materiales reciclados, recursos naturales, cuentos, juegos, instrumentos musicales y tecnología. Los materiales no solo se usan para enseñar, sino también para explorar, crear y transformar.
Flexibilización del currículo y respeto al ritmo individual
Una de las transformaciones de la NEM en preescolar versus el modelo anterior es que muchas veces se esperaba que todos los niños aprendieran lo mismo, al mismo tiempo y de la misma manera. La NEM cambia esta lógica y reconoce que cada niño tiene su propio ritmo, estilo y forma de aprender.
Por eso, el currículo se vuelve flexible y adaptable. Las planeaciones ya no son recetas fijas, sino guías abiertas que permiten al docente tomar decisiones pedagógicas según las necesidades del grupo y de cada estudiante.
